viernes, 7 de marzo de 2014

"Eichmann", de Robert Young

Para comprender esta película es necesario partir de la base de que no se trata de la biografía de una de las principales cabezas pensantes que activaron la infalible y letal maquinaria del holocausto judío llevado a cabo por el régimen nazi de Alemania, durante la Segunda Guerra Mundial. Si tan sólo fuese eso, no estaría comentando una película, sino seguramente un libro, puesto que el escenario más cómodo para el género biográfico es la literatura, encuentro. 

Cartel de la película (filmaffinity.com)
En "Eichmann", Young apuesta por una arriesgada historia que mezcla el pasado militar del personaje, un temible obersturmbannführer (jefe superior de unidad de asalto) que no muestra ningún tipo de reparo a la hora de actuar, con un, aparentemente inocente, padre de familia que trata de huir de la justicia desde Argentina. Para ello el director británico intercala acciones del desalmado líder nazi durante los días del Tercer Reich con el escenario de su interrogatorio en una pequeña celda, ya en territorio israelí, hasta el 15 de diciembre de 1961, fecha en que fue condenado a muerte por sus responsabilidades en el genocidio judío.

El escenario del iterrogatorio es brillante. Denota un gran componente psicológico entre el ideal nazi, representado por Eichmann, y la realidad del pueblo judío, que no sólo ha sobrevivido sino incluso dispone de estado propio.Para esta cuestión, el director británico profundiza en la cuestión de la pureza racial llevada al extremo, una de las bases del régimen hitleriano. El joven capitán de la policia israelí que interroga al famosa reo debe ir destapando las diferentes pieles de la cebolla para tratar de ver lo que realmente guarda en su interior.

Una escena del interrogatorio (elseptimoarte.net)
Además de esto, las escenas del 'Eichmann militar' sobrepasan el concepto de simples 'flashes', ofreciendo un gran potencial a una trama que no cesa de avanzar en ningún momento. Young sabe sacar mucho brillo de un popurri de acciones pasadas y presentes, mezclado con un fuerte copmponente psicológico y un inevitable espacio para las emociones y el factor personal.

En general, "Eichmann" se nos presenta como una hsitoria narrada desde la realidad de los hechos, bien documentada y con fundamento. Un proyecto muy interesante de analizar por su alto contenido histórico, pero también por su trato del ser individual desde una óptica íntima y personal, y con un toque psicológico muy marcado. En este caso un ser individual que fue juzgado por sus responsabilidades en la muerte de seis millones de personas en los campos de concentración.




jueves, 6 de marzo de 2014

La soberbia se mueve en Crimea

Durante toda la mañana de ayer no dejaron de publicarse twits y twits sobre la nominación de Vladimir Putin al Premio Nobel de la Paz. Uno de ellos, en concreto, denunciaba de forma irónica que se hubiese pensado en el presidente ruso y no en el líder supremo de Corea del Norte, por ejemplo. La verdad es que pensando en el hecho, cuesta creer que se equipare al líder ruso con otras nominaciones de carácter mucho más pacifista como Malala, la joven paquistaní tiroteada por estudiar, o Edward Snowden, el exanalista de la CIA que filtró informaciones sobre el espionaje telefónico de Estados Unidos.

Putin y Yanukovich, factores de la inestabilidad en Ucrania (sopitas.com)
Putin ha movido su ficha en el caso de Ucrania. Ha ignorado los motivos que desencadenaron en una revuelta manchada de sangre y en la deposición del presidente Yanukovich, a quien ha acogido sin más dilación. El hecho de haber movilizado sus tropas en las fronteras ruso-ucranias no es una muestra de preocupación por los sectores prorrusos que se han alzado tras el fin de la revolución, sino que es una evidencia del carácter oportunista y ególatra del gigante del este. 

Cierto es que en Ucrania ha quedado una realidad que no se puede ignorar: el país está dividido entre partidarios de una apertura hacia la Unión Europea, que parece encantada de acoger a otro país con ciertos riesgos de inestabilidad sociopolítica y económica, y los adeptos a la vecina Rusia, que defienden la necesidad de reforzar las relaciones con su más grande y antiguo aliado. En medio de este ambiente, Putin ha tomado la determinación  de mover sus tropas y con ello, la amenaza más patente de que estalle una guerra civil con intervencionismo internacional

Pese al supuesto repliegue de tropas que ya ha comenzado Rusia, ahora queda lugar para el castigo económico y financiero a Ucrania, en primer lugar con la venta de gas de la multinacional Gazprom, que no rebajará nada desde el mes de abril. Además, el líder ruso se apunta un tanto personal con las maniobras militares puesto que en pocos días ha logrado establecer un ambiente de miedo y de tensión a nivel internacional sin precedentes.

Soldados en una ciudad de la región de Crimea (swissinfo.ch)
La oposición mundial, encabezada por Estados Unidos, eterno enemigo de la Guerra Fría, se ha limitado a palabrear y a buscar sus intereses en la cuestión ucraniana desde una posición de establecedores de la paz mundial, muy de moda desde la Segunda Guerra Mundial. La Unión Europea sigue aferrada a su obsesión particular con las cuentas y las 'ayudas' que después se convierten en préstamos inmortales. Lo que necesita Ucrania no es avanzar ni que la avancen hacia ningún tipo de conflicto bélico que la autodestruya. Es necesario recordar que, por mantener su opulencia y sus lujos, Yanukovich asesinó a más de ochenta civiles. No es necesario que se derrame más sangre en el país. Y mucho menos que la sangre alcance ahora otros territorios. Pero para ello es necesario que todos los actores internacionales renuncien a su particular soberbia y a su impetuoso orgullo, cosas a las que se aferran a golpe de fusil, de amenaza y de movimientos militares.
 

viernes, 28 de febrero de 2014

"Las llaves de casa", de Gianni Amelio

Siempre me pregunto si el uso del término 'discapacitados' es justo a la hora de referirnos a ese sector de la población que padece algún tipo de impedimento físico o psicológico. En verdad, todos sufrimos algún tipo de discapacidad. Hay quien sufre la física, otros la psicológica y luego existe un gran porcentaje de la población que vive creyendo que no hay nada fuera de lo normal en su persona. Mentira. Si nuestros ojos son capaces de mirar a otro ser humano y considerarlo 'discapacitado', entonces ya poseemos algo que rompe, o al menos debería hacerlo, con la normalidad

Cartel del film (filmaffinity.com)
En la película de Amelio se trata de relacionar estas dos realidades que nos parecen opuestas, pero que están íntimamente ligadas y dependen la una de la otra: la de las personas consideradas como 'subnormales' y la de las aparentemente 'normales'. El término 'subnormal' erradica todo el valor de cualquier individuo. Podría considerarse un término tan despectivo como los que utilizaban los nazis para referirse a los judíos. El director italiano ata cualquier cabo suelto para crear una esfera de completa normalidad alrededor de un adolescente impedido tanto física como psicológicamente. 

Con un tono que llama al arrepentimiento, van presentándose una serie de elementos a lo largo de la trama que llevan por la fuerza al espectador hacia el terreno reflexivo y autocrítico de la mente. Una historia que enseña a amar de nuevo y comenzar desde cero la visión que se tiene hacia aquellos a los que vulgarmente llamamos 'discapacitados'.

Padre e hijo abrazándose (dvd.es)
En ella se plasma una relación íntima entre un padre y un hijo que se encuentran después de mucho y que asumen, más que deciden, el hecho de volver a caminar juntos y a compartir vida. A su vez, Amelio también sabe ligar la relación entre lo que tiene cabida dentro de la normalidad y lo que queda fuera, creando una única realidad, sensible a las dos partes, en la que se alcanza una fusión de ambas absoluta e inigualable. Consigue cambiar el punto de vista de un espectador acomodado en unas etiquetas sociales de lo más injustas

"Las llaves de casa" es el resultado de experimentar la pureza de una relación de amor padre/hijo poco usual, con el fin de arraigarla y convertirla en habitual en cualquiera de las concepciones preexistentes.



jueves, 27 de febrero de 2014

La calma del Monasterio de Poblet

El frío de las montañas de Prades es seco e intenso. Detrás de unas grandes paredes de verdes y frondosos árboles, reluce un sol tenue y pálido, anegado por las nubes, que no calienta. El viento va despertando con el paso de las horas en la mañana, manifestándose a través de pequeñas pero punzantes rachas que parecen atravesar cualquier tipo de abrigo con el que pueda taparse el cuerpo. El monasterio yace en silencio mientras uno tras otro, van aparcando en sus históricos adoquines todos los coches, de gama alta, de los agentes de seguridad y de los responsables de prensa de la Casa Real.

Rápidamente los responsables de prensa se acercan a los medios. Después de presentarse comienzan a marcarles todos y cada uno de los movimientos que habrán de hacer por tal de seguir al príncipe Felipe a lo largo del acto. Me parece un tanto humillante, puesto que en el caso de mis compañeros de TV3, se tratan de profesionales que llevan más de veinte años en el mundo de la comunicación y estoy más que convencido que sabrán tomar los planos adecuados.

Felipe llegó con todos sus lujos a Poblet (elpaís.com)
Preguntan para qué programa estamos rodando. Nuestro operador de cámara responde que se trata de un informativo nacional, de aquí de Cataluña. Uno de los responsables de prensa le mira fijamente, escondiendo sus ojos tras unas gafas de sol muy grandes y oscuras, y dibuja una mueca como de asombro y de ironía al mismo tiempo. Parece haberse dado cuenta de que la existencia de la nación catalana es real. 

Entre miradas de complicidad con los otros reporteros y frías ráfagas de viento, llega Felipe. Los agentes de seguridad, con pinganillo de oreja incluido, se colocan formando un extraño óvalo y nos miran fijamente, con mucha atención. No entiendo porqué, puesto que los perros rastreadores ya han registrado las bolsas de las cámaras y los equipos. Primero llega un BMW 328i, color negro, de gama alta, seguido de dos Mercedes 220, también de gama alta, de color azul océano. De todos ellos bajan más agentes de la policía secreta y guardaespaldas. De pronto, aparece un tercero Mercedes que aparca frente a nosotros. El copiloto abre la puerta del pasajero de atrás, y Felipe baja del coche. Un caos de flashes y gritos coomienza a propagarse por los recobecos del monasterio. "Guapo", gritan un grupo de mujeres mayores que se encuentran visitando el lugar.
Una visita innecesaria con un despliegue innecesario (abc.es)

Tras estrecharse la mano con el abad, el cual dibuja una sonrisa cómplice que denota de todo menos preocupación, entra en el interior de la iglesia. Quince minutos después, el heredero de Borbón sale para saludarse con el poco público que hay y con la inmensa comitiva de actores políticos que le esperan. Están el alcalde de Reus (puesto que el acto es una reunión con la sociedad bicentenaria del general Prim), el delegado de la Generalitat en Tarragona, Joaquim Nin, y una infinidad de rostros que esperan a saludar y estrechar la mano del príncipe. 

A medida que van pasando las horas y que la comitiva queda cómodamente reunida, los periodista se van marchando y los coches de lujo van desapareciendo. Los agentes de seguridad siguen mirándonos con suma cautela. Es mediodía y ya  no hay más que hacer. En realidad, en ningún momento ha habido nada que hacer, más que contemplar la hermosura del bello lugar que es Poblet.

viernes, 21 de febrero de 2014

"Vivir es fácil con los ojos cerrados" de David Trueba

El último trabajo de Trueba resulta ser un proyecto sencillo y bastante lineal, pero que sirve de refresco a una industria cinematográfica española desfallecida por los recortes y por una mala fama justificada con el rastro de muchos films vacíos y estereotipados. Cabe tener en cuenta, también, lo bien parada que ha salido de la última edición de la gala de los Premios Goya y el más de un millón de euros que ha recaudado hasta la fecha.

Cartel de la película (filmaffinity.com)
En su última película, el director madrileño apela por el humanismo cotidiano. El contraste de vidas completamente diferentes pero que se encuentran en un punto concreto para compartir sentimientos y emociones diversas. Una historia humilde y próxima a una rutina más que real, enmarcada en el contexto de un tardo-franquismo que no podía resistir el envite del mundo, que se abría a su alrededor descubriendo las nuevas culturas musicales y artísticas. 

El argumento se enfoca en la obsesiva búsqueda que un profesor de inglés mantiene por hablar con el célebre músico de The Beatles, John Lennon, quien está de rodaje en Almería. Pero paralelamente se añaden otros elementos a la trama; un triángulo amoroso que sirve como elemento clave para el intercambio emocional entre los compañeros de viaje; la fugaz huida de un adolescente ante la autoritaria figura de su padre; un embarazo no deseado, etc..

Fotograma con Javier Cámara (musiczine.es)
La nota negativa la trae un elemento que suele ser abusivamente habitual en los metrajes españoles: el sexo. Únicamente visible en una escena, aparece introducido con cierta insistencia y no acaba de encontrar su momento en la línea argumental. Puede resultar violento en lugar de inesperado. Como metido con un calzador. Aún así, "Vivir es fácil con los ojos cerrados" representa un destello de lucidez en una industria hispánica bastante dañada por la actitud mostrada en épocas anteriores, donde sexo y drogas eran indispensables en cualquier historia. 

No destaca por presentar algo nuevo. Tampoco por ser deslumbrante. Pero sí lo hace por el hecho de abandonar viejos y corrosivos patrones, y apostar por la emotividad dentro de la rutina de una manera más delicada y detallista.

jueves, 20 de febrero de 2014

¿Y el nobel de la paz?

En el año 2012 la Unión Europea recibió el Premio Nobel de la Paz por mantener el orden y la paz durante más de sesenta años en el continente. En el mes de mayo de 2013 los ciudadanos ucranianos comenzaron a protestar por sus calles y plazas contra las gestiones de su propio gobierno y con el objetivo claro de expresar su voluntad de entrar a formar parte de esta unión de países continentales. A día de hoy, 20 de febrero del 2014, los enfrentamientos entre manifestantes y antidisturbios han dejado 26 fallecidos y prosiguen, sin avanzar, en una especie de punto muerto.

Ucrania es el punto muerto de la política internacional (abc.es)
El presidente Viktor Yanukóvich ha firmado una tregua esta mañana con la oposición, después de haber recurrido a la vara de hierro y no lograr la retirada de los manifestantes. Putin se esconde tras sus fronteras y sus Juegos Olímpicos de Invierno y parece ni tan siquiera conocer el nombre de su mayor vecino. Obama no ofrece ayuda, sino que amenaza al más puro estilo yankee. Y la Unión Europea, pendiente de la reunión de todos sus Ministros de Asuntos Exteriores, se plantea el hecho de sancionar al país éstico pero sin miras al final del conflicto. 

Es bochornoso que el presidente de un país esté dispuesto a llegar hasta este punto por tal de aferrarse al poder. Y eso sin tener en cuenta el punto al que podría llegar si la revuelta continuase. Es bochornoso ver como el presidente de lo que se hace llamar 'una gran potencia mundial' esconde la cabeza en los J.J.O.O. más caros de la historia. Es bochornoso ver como el hombre que denunciaba la posesión de armas químicas en Siria, y que recibió el último Premio Nobel de la Paz por ello, se limita a amenazar desde el otro lado del océano. Es bochornoso observar a una Unión Europea, Premio Nobel de la Paz por sus gestiones pacíficas y el mantenimiento del orden en el continente, que sigue estancada en sus reuniones y comitivas pero que no logra activar la praxis que de estas puedan extraerse. Todo está siendo bochornoso, si es que este término es lo suficientemente justo como para describir una situación como la ucraniana. A mí, francamente, me parece muy incompleto. 
Las revueltas son ahora una Guerra Civil de guerrillas (publico.es)

La vieja Guerra Fría que parece no apagarse nunca. El tirano Yanukóvich insiste en reforzar sus relaciones con la Federación Rusa mientras su estado le reclama la entrada en la Unión Europea y una mayor preocupación por las relaciones con occidente. Se desata una guerra civil de guerrillas y el resto de la comunidad internacional se dedica a parlotear respecto al asunto. Quizás dentro de poco a alguien se le ocurra la idea de que allí también hay armas químicas y pueda anotarse un gran tanto a favor para el Premio Nobel de la Paz. Mientras tanto, entre falsas treguas y enfrentamientos urbanos completamente radicalizados, la situación en Ucrania se va convirtiendo en un conflicto cada vez más oscuro y descontrolado, donde todo se permite, todo es torturable e incluso objeto de muerte. Realidad y reuniones oficiales vuelven a no corresponderse como deberían y en medio de este estado ¿dónde están nuestros dos últimos grandes pacificadores?

viernes, 14 de febrero de 2014

"La voz dormida" de Benito Zambrano

La adaptación cinematográfica de la novela homónima escrita por la difunta Dulce Chacón se postula como una de esas excepciones por las que vale la pena no dar por perdido el cine español. Porque si Hollywood puede mitificar a personajes como el soldado Ryan o inventarse a superagentes, como Ethan Hunt de Misión Imposible, que pueden ser de todo menos reales, ¿por qué no puede la industria cinéfila española dar vida a sus héroes de Guerra?
Cartel del film (filmaffinity.com)

Y no hablo de dar una vida fantástica e imaginaria, como puede verse en Jack Ryan, el último agente de la CIA llevado a la gran pantalla, sino que hago referencia a reproducir los lamentos y las luchas, las pasiones y condenaciones de aquellos que compartieron fusil y uniforme con nuestros abuelos en la guerra de 1936. Este es el cuadro sobre el que se plasma la interesante historia creada por la escritora extremeña y a la cual de vida en la gran pantalla Benito Zambrano.

Con "La voz dormida" se nos narra un contexto real marcado por el 'reciclaje' franquista que prosiguió al conflicto bélico. Con personajes que encarnan la realidad de cualquier hombre y mujer de la posguerra española, vencedores y vencidos, todos expuestos al hambre y la cólera de un régimen recién estrenado. 




Fotograma de una escena en prisión (culturamas.es)
Con una impecable sensibilidad, la película plasma la historia de dos hermanas perseguidas por sus ideales comunistas y toda la amargura por la que han de pasar. Una historia difícil, cargada de tristes sorpresas, pero sobretodo una historia que se asemeja fielmente a la realidad. Una historia que podría identificarse con los orígenes de alguna de nuestras familias. Realidades como esta, lejos del espectáculo y de la fascinación hollywoodiense por lo increíble, son las que verdaderamente logran arrastrar al espectador a lo largo de la historia de la humanidad, al punto que se quiera, emulando lo que se vivió y cuánto pudo llegar a sentirse. 

Sin duda alguna, Chacón sabe crear una historia concreta y directa que plasme los horrores del franquismo más neonato y Zambrano se encarga de convertirla en imágenes visibles para un público que necesita estar sediento de conocimiento sobre su pasado histórico y sobre los hechos que tuvieron lugar en las carreteras y calles que, ahora asfaltadas, caminamos con desdén y sin mirar atrás.